V.I.T.R.I.O.L. después de la iniciación

 

El viaje de un masón no concluye con la iniciación, sino más bien inicia ahí. La iniciación es el primer paso en un proceso de constante crecimiento y búsqueda de la iluminación personal e intelectual. En este sendero, el término V.I.T.R.I.O.L. resulta ser fundamental dentro de la simbología masónica y sirve como un acrónimo de la frase en latín “Visita Interiora Terrae Rectificando Invenies Occultum Lapidem”, que puede traducirse como “Visita el interior de la Tierra y rectificando encontrarás la piedra oculta”.

Este axioma alquímico trasladado a la masonería se convierte en una metáfora sobre la transformación del ser y la búsqueda constante del conocimiento. Para el Neófito, reflexionar sobre el V.I.T.R.I.O.L. significa embarcarse en un viaje introspectivo hacia lo más profundo de su ser, con la intención de purificar y perfeccionar su piedra bruta –su alma o yo esencial– y así descubrir la sabiduría oculta dentro de sí mismo.

El Viaje Interior:

Después de la iniciación, la recomendación espiritual de “visitar el interior de la Tierra” insta al masón a examinar su mundo interno, sus pasiones, instintos y prejuicios. Este es un proceso de mirarse honestamente en el espejo de su conciencia, examinando las imperfecciones y trabajando para rectificarlas, en búsqueda de la armonía con las leyes morales y universales.

El Proceso de Rectificación:

Rectificar significa corregir, y en el contexto masónico implica un compromiso con la mejora continúa. El Maestro Masón es consciente de que este es un trabajo de toda la vida, donde cada experiencia y cada enseñanza recibida en la logia deben ser aplicadas en el mundo profano para promover la virtud y la integridad.

La Piedra Oculta:

La “piedra oculta” representa la verdad última o el conocimiento supremo que el masón busca a través de su transformación personal. En la alquimia, esto se identificaría con la obtención de la piedra filosofal, símbolo de sabiduría y clave para la transmutación de los metales base en oro, lo cual en el contexto masónico se traduce en la transmutación de las imperfecciones humanas en virtudes.

La Trascendencia de la Iniciación:

La iniciación masónica abre las puertas hacia el conocimiento esotérico, pero es a través de la meditación en principios como V.I.T.R.I.O.L. que el masón continúa su verdadero trabajo. El proceso alquímico simbólico de convertir plomo en oro es análogo al perfeccionamiento ético y moral que el masón aspira alcanzar en su vida.

En conclusión, V.I.T.R.I.O.L., más que un conjunto de palabras, es una guía de viaje para el masón que ha cruzado el umbral de la iniciación, es un llamado a la reflexión profunda, al compromiso con la auto-mejora, y a la búsqueda constante de la luz que ilumine la oscuridad de la ignorancia, tanto dentro de él como en el mundo que lo rodea.